martes, 7 de junio de 2011

Iniciando chequeo interno del sistema...

En este post (el último dentro de la asignatura de Web Social) voy a realizar una autoevaluación de mi actividad a lo largo de la asignatura. Como cabe esperar, no será un análisis absolutamente neutral, porque se trata de una materia en la cual no soy objetivo, pero intentaré dentro de lo posible hacer una valoración fría, con la lógica de un vulcano.






TWITTER

Puntos fuertes.

1. He participado a través de Twitter de un modo muy activo a lo largo de toda la asignatura. En total, hasta el momento (7 de junio de 2011) he enviado 485 tweets. Después de Isabel Hortal, es probablemente la participación más activa en Twitter, si exceptuamos a los compañeros que ya lo utilizaban de forma habitual antes de cursar esta asignatura.



2. La mayoría de los tweets enviados han sido para compartir enlaces muy relacionados con la asignatura y todos de interés, en mi opinión: noticias de prensa relacionadas con redes sociales; artículos sobre diversas herramientas y sobre las mejores estrategias para actuar en redes sociales; etc.

3. He sido el único del grupo (si no me equivoco) que ha compartido de forma habitual noticias de prensa internacional relativas a redes sociales; principalmente, noticias de 'The New York Times', pero también algunas de 'The Washington Post', la BBC, la CNN y 'Wall Street Journal'.

4. La actividad ha sido mantenida de forma continua a lo largo de estos dos meses, si bien con variaciones importantes en función del número de noticias que apareciesen cada día; este aspecto queda muy bien reflejado en los gráficos que proporciona TweetStats:









5. Una vez que vi que el volumen de mensajes diarios podía resultar excesivo para algunos miembros del grupo, intenté adaptar un tanto mi estrategia y ser más selectivo con los mensajes a compartir (aunque bastantes veces eso me resultó casi imposible, dada la cantidad de noticias interesantes que aparecían en las fuentes a las que estaba suscrito).

6. El nivel de interacción con el resto del grupo ha sido también considerable: un 23,30% de mis tweets han sido respuestas.

7. He adoptado distintas herramientas para gestionar mis perfiles en redes sociales con más eficacia, principalmente TweetDeck y HootSuite, así como herramientas complementarias, como Twextra, TinyURL, diversas aplicaciones para analizar el nivel de influencia de un usuario, etc. (las distintas herramientas que he ido adoptando a lo largo del curso las he detallado ya en un post publicado el 29 de abril y actualizado el 7 de junio).



Puntos débiles. 

1. La participación ha podido llegar a ser excesiva, hasta el punto de provocar 'infoxicación' en algunos compañeros. Quizás habría sido preferible una mayor selección de los enlaces a enviar.

Sin embargo, como he explicado ya en comentarios a otros blogs, es un aspecto que tampoco tengo claro al 100%, porque encuentro que toda o casi toda la información que he enviado era realmente interesante y, aunque sea imposible leerla sobre la marcha, merece la pena archivarla para revisarla posteriormente con más calma.

Admito que un volumen excesivo de envíos puede ser contraproducente, porque desanime a nuestros seguidores y porque los tweets más importantes pierden visibilidad, pero tampoco me atrevería a establecer una regla rígida; es un aspecto que habría que valorar dependiendo del perfil de nuestros seguidores.

2. He realizado los envíos a medida que encontraba las noticias, en vez de programarlos para distintas horas a lo largo del día, lo cual habría reducido la sensación de saturación.



FACEBOOK

Puntos fuertes.

1.  He realizado todas las actividades obligatorias más allá de lo exigido. Por ejemplo, no me limité a instalar una aplicación en la página de la asignatura, sino que probé al menos cuatro (Blog Tab, Poll, RSS Graffiti, Contacto), seleccionando después una de ellas para explicarla con detalle en el blog. Además, puse varias aplicaciones más en mi perfil personal.

2. He participado en varios debates a través de Facebook; en algunos, desarrollando mis argumentos con bastante extensión.

3. Conecté mis perfiles de Twitter y de Facebook a través de la aplicación Selective Tweets, de modo que si lo deseo, cualquier mensaje que publique en Twitter puede aparecer simultáneamente en Facebook, sin más que añadir la hashtag #fb.
He conseguido también el mismo resultado integrando mis perfiles de Twitter y de Facebook mediante TweetDeck y HootSuite.

4. Cuando vi que el envío simultáneo del mismo mensaje por Twitter y por Facebook podía ser contraproducente y llegar a considerarse como spam, adapté mi estrategia y limité los envíos a Twitter, salvo contenidos específicos que me parecieron adecuados para Facebook.




Puntos débiles. 

1. Como ya he señalado, en un principio quizás vinculé de un modo excesivo mis perfiles de Twitter y de Facebook, enviando la misma información por duplicado.

Sin embargo, es un aspecto en el que pienso lo mismo que acerca del volumen elevado de tweets, que es un arma de dos filos, y tampoco me atrevería a afirmar tajantemente que sea un error enviar los mismos mensajes por varios canales. Al fin y al cabo, habrá seguidores que prefieran usar Twitter y otros que sean partidarios de Facebook, y también resulta positivo ofrecerles ambas opciones.

2. La información que he compartido a través de Facebook ha sido básicamente en forma de enlaces, de un modo similar a lo que he hecho mediante Twitter, pero no he utilizado las mayores posibilidades que ofrece Facebook para compartir fotos o vídeos.

3. En los debates, quizás mis respuestas han sido excesivamente extensas y por ello poco apropiadas para el formato de Facebook. Nuevamente, no lo tengo claro al 100%, pero admito que es opinable y que en ocasiones puede ser hasta contraproducente.



BLOG

Puntos fuertes.

1. He realizado todas las actividades obligatorias, dentro del plazo previsto.

2. He escrito también al menos dos entradas adicionales, fuera de las actividades establecidas: una comparando TweetDeck con HootSuite y otra analizando la utilidad de Topnuz.

3. Todas las entradas las he desarrollado ampliamente, bastante más allá de la extensión establecida como mínima obligatoria. Y he utilizado adecuadamente esa mayor extensión, argumentando en detalle mis opiniones, aportando datos adicionales mediante herramientas que no eran obligatorias, etc.

4. La redacción de las entradas ha sido, en general, bastante clara y ordenada.

5. En cuanto al diseño del blog, no me he limitado (como no lo ha hecho nadie, o casi nadie) a una plantilla estándar, sino que la he modificado, intentando darle un aspecto atractivo y profesional.

Además, he incorporado diversos gadgets, con los cuales he incluido en el blog:

- Un buscador interno que utiliza la tecnología de Google.

- Posibilidad de suscribirse al blog mediante una amplia variedad de agregadores RSS y también mediante correo electrónico (gadget de Wikio, no disponible en la lista estándar de Blogger).

- Dos directorios de enlaces externos.

- Mis tweets más recientes y un enlace a mi perfil de Twitter.

- Botón para compartir el blog en Facebook.

- Panel de botones, los cuales aparecen en cada entrada del blog, permitiendo compartirla a través de una amplia lista de redes sociales (gadget de AddThis, no disponible tampoco en la lista estándar de Blogger).


6. He comentado ampliamente los blogs de mis compañeros. No he comentado todos de forma sistemática, sino sólo aquellas entradas en las que realmente me ha parecido que tenía algo que añadir, pero cuando lo he hecho han sido por lo general comentarios extensos, desarrollando ampliamente argumentos adicionales.

7. Además del blog de la asignatura, he escrito también un par de entradas en mi blog de la red Library 2.0, en inglés. Esto creo que he sido el único de todo el grupo que lo he hecho: algún compañero compartió por esa vía entradas del blog de la asignatura, pero yo he sido el único en escribir entradas específicas, en inglés.


Puntos débiles. 

1. La extensión de las entradas puede ser también contraproducente en ocasiones: puede llegar a agobiar a nuestros seguidores y hacer que pierdan el interés por leerlas.

He intentado contrarrestar esto dividiendo alguna entrada en varias partes, pero aún así es cierto que pueden resultar excesivamente extensas, y puede ser aconsejable intentar buscar un equilibrio para poder desarrollar los argumentos suficientemente, pero al mismo tiempo condensar las ideas dentro de lo posible.

Pasa algo similar con la extensión de mis comentarios, que puede ser excesiva (en ocasiones han sido más extensos que la propia entrada que estaba comentando). De nuevo no lo afirmaría tampoco de un modo tajante, porque para argumentar adecuadamente una postura a menudo es inevitable extenderse; pero admito que en el contexto de la web 2.0 la concisión puede proporcionar una ventaja estratégica.

2. Mi estilo de redacción, aunque claro y ordenado, puede ser excesivamente formal para este contexto. Este aspecto se nota, sobre todo, al comparar mis entradas con las de otros compañeros, que precisamente por escribir de un modo más informal despiertan un mayor interés en leerlas.

En este aspecto, es cierto que a mí me sale de forma instintiva el tono de profesor de Matemáticas (que es lo que fui durante algunos años) explicando los pasos para resolver una ecuación de primer grado: muy claro, ordenado y metódico, pero quizás excesivamente neutro.

3. El diseño de mi blog puede ser también excesivamente neutro, comparando con los de otros compañeros, y lo mismo ocurre con las entradas, en donde tiendo a utilizar imágenes sólo cuando me parecen verdaderamente necesarias (gráficos, pantallazos, etc.), con lo cual el aspecto visual termina resintiéndose un tanto.


WIKI

Puntos fuertes.

1. He creado y editado bastantes más páginas de las establecidas como obligatorias. 

2. Me ocupé de crear el índice para el curso 2010/2011, y desde entonces, he estado vigilando las páginas que se iban creando, para añadirlas al índice y mantenerlo actualizado si el autor no lo había hecho.

3. Fui el primero en realizar un estudio de caso, el de la New York Public Library. Y he sido asimismo el primero (y por ahora, junto con Nacho Peso, el único) en hacer estudios de caso de centros no españoles: además de la NYPL, creé también la página del BBC Archive.

4. Por consiguiente, y conforme a lo que se indicó, mis aportaciones (tanto las entradas creadas como las editadas) no se han limitado a herramientas, sino que he realizado varios estudios de caso.

5. He participado también en todas o casi todas las discusiones que se han creado dentro de la wiki, y he creado yo alguna.



Puntos débiles.

1. Las ediciones que he hecho han sido principalmente ampliando las entradas e incorporándoles párrafos o apartados enteros, pero no he llegado a modificar en profundidad el texto creado por otros compañeros.

2. Aunque estuve intentando incorporar imágenes, no he logrado hacerlo hasta que se ha habilitado la opción de 'Subir archivo'.



VALORACIÓN GLOBAL

En resumen, aunque desde luego hay aspectos mejorables, creo que en conjunto puedo decir objetivamente que mi trabajo y mi aprendizaje han sido más que satisfactorios, y desde luego ha sido una de las asignaturas del Máster que más han llegado a interesarme.

Sin embargo, ahora es el momento de no detenerse aquí y de seguir leyendo, probando más herramientas... en esta materia como en otras muchas en las que tendríamos que seguir trabajando de forma continua.

domingo, 5 de junio de 2011

Los Cuarenta del Patíbulo

En este post voy a describir cuál ha sido mi impresión personal de la actividad de mis compañeros de la asignatura de Web Social y cómo muchos de ellos han librado una batalla épica contra las redes sociales en la cual se han hecho matar con las armas en la mano, combatiendo como un prao del Tigre de Malasia contra un acorazado inglés.





El primer aspecto que creo que es evidente es que dentro del grupo ha habido desde aquellos que hemos estado implicadísimos con la asignatura hasta rayar en el trastorno obsesivo-compulsivo, hasta los que precisamente han podido sentirse agobiados por ese exceso de actividad y eso ha podido llegar a desanimarles en algún momento, pasando por los escalones intermedios.

El análisis mediante Klout de todos los miembros del grupo (según datos recogidos el 4 de junio) refleja muy bien estas distintas actitudes ante la asignatura, ya que la herramienta nos clasifica en 5 categorías:

- Networker. Sabe cómo conectarse con las personas adecuadas y compartir lo que es importante para su audiencia. Comparte generosamente su red para ayudar a sus seguidores. Tiene un alto nivel de compromiso y una audiencia influyente.

- Socializer. Es el centro de las escenas sociales y la gente confía en él para saber lo que está sucediendo. Se conecta con otras personas con rapidez y comparte fácilmente sus conocimientos sociales. Sus seguidores valoran su red de contactos y su generosidad.

- Conversationalist. Disfruta realmente estando conectado y siempre quiere estar informado de lo que está ocurriendo. Practica la buena conversación hasta el punto en que no es sólo una habilidad sino un arte. Cuando es ingenioso, sus seguidores están pendientes de cada palabra.

- Explorer. Se compromete activamente en la web social, buscando constantemente nuevas formas de interactuar y conectarse. Está explorando el ecosistema y haciendo que trabaje para él. Su nivel de actividad y compromiso revela que lo logrará y que en breve mejorará su posición en la red.

- Dabbler. Es probable que esté empezando a introducirse en la web social o que realmente no esté en ella. Si quiere que su influencia aumente, debería tratar de comprometerse con su audiencia y compartir más contenidos.


Estos datos, sin embargo, deben ser usados con cautela, porque hay factores que pueden sesgar la valoración que realiza la herramienta.

Así, la mayoría de los que son clasificados dentro del primer grupo, el de networkers, son los que no han empezado a utilizar las redes sociales (especialmente Twitter) con esta asignatura, sino que ya llevaban bastante tiempo usándolas de un modo profesional y tenían una buena red de seguidores. La excepción somos Isabel Hortal y yo mismo, que somos los únicos que creamos nuestra cuenta de Twitter al empezar la asignatura y sin embargo hemos llegado a entrar en esta categoría.

Otro factor de sesgo es el de algún compañero que prácticamente no ha enviado tweets y sin embargo tiene unos 40 seguidores, debido a que le seguimos todos los miembros del grupo. Esta desproporción entre los tweets enviados y el número de seguidores sesga la valoración y le da una posición mucho más alta de lo que debería.

He analizado a todo el grupo también con Twitter Grader y el ranking que se obtiene es muy similar al de Klout, así que creo que las categorías obtenidas pueden considerarse como una primera aproximación aceptable de los distintos niveles de influencia dentro del grupo, aunque con las cautelas señaladas.

En conjunto, se puede concluir que una parte considerable de la clase entra en las primeras categorías, que reflejan todas un buen nivel de actividad y de compromiso con su red; unos con mayor participación que otros, pero muchos dentro de unos niveles más que aceptables.

Es cierto, al mismo tiempo, que algunos pueden haberse sentido agobiados por el exceso de actividad que ha habido en ocasiones, y me reconozco como uno de los responsables. Sin embargo, creo que esto es también una cuestión de pensar en cómo utilizar del modo más eficaz el volumen ingente de información que ha ido transmitiéndose, que puede ser verdaderamente útil si se gestiona adecuadamente.

Por otra parte, un aspecto que sí me ha llamado la atención es el uso de Facebook. En general, la mayoría ha optado por compartir información principalmente a través de Twitter, relegando en ese aspecto Facebook a un segundo plano. La estrategia de enviar la misma información por dos canales es un arma de dos filos, y tiene sus ventajas y sus inconvenientes; pero por eso mismo me ha sorprendido un tanto la práctica unanimidad en ese sentido: habría esperado un mayor equilibrio entre los seguidores de Facebook, de Twitter y de ambas redes simultáneamente.



Después de esta valoración global, voy a señalar a algunos compañeros cuya actividad me ha llamado especialmente la atención por diversas razones (aunque estoy hablando sobre todo de memoria y tengo la certeza de que me dejaré en el tintero a varias personas que merecerían ser citadas).

En mi opinión, destaca especialmente Isabel Hortal, que ha sido una de las personas más activas a lo largo de toda la asignatura, en todos sus aspectos:

- Ha enviado un gran número de tweets. Incluso yo, que soy twitterati compulsivo, no puedo competir con ella, ¡es una fuerza de la Naturaleza!

- Su participación en Twitter no destaca sólo por la cantidad (que por sí sola no tendría mayor interés) sino por la calidad: ha compartido muchos enlaces interesantes, ha transmitido su experiencia sobre el uso de diversas herramientas, ha hecho una gran labor dinamizando al grupo y creando un verdadero espíritu de trabajo en equipo...

- Ha probado, como he dicho, diversas herramientas y ha transmitido su experiencia al resto del grupo.

- Su participación en Facebook, además de por probar también distintas aplicaciones, participar en debates, etc., se ha distinguido por la creación de grupos específicos que han contribuido también a dinamizar el grupo.

- Fue la primera (si no me equivoco) que realizó una contribución a la wiki, y desde entonces ha seguido participando en el proyecto.

- Ha sido enormemente activa en cuanto a comentar todos los blogs; probablemente la persona que más comentarios ha dejado, con mucha diferencia. Sus propios posts están también siempre bien redactados y resultan interesantes.

En resumen, como digo, una de las personas más activas a lo largo de toda la asignatura.

Hay varios compañeros más cuya actividad también me ha parecido que aportaba aspectos realmente interesantes, pero quizás en elementos más concretos. Por ejemplo (y repito que sin duda me estoy olvidando de varias personas):

- Santiago Saborido, que también ha aportado a través de Twitter gran número de enlaces interesantes y que fue además el primero (si no recuerdo mal) en crear su diario mediante Paper.li, iniciativa que luego fue imitada por Isabel.

- Belén Benito, también bastante activa en Twitter.

- Henar Silvestre, que destaca claramente por la originalidad y la frescura de sus posts, que realmente dan ganas de leerlos. Especialmente creativa sobre todo escogiendo títulos para sus posts, en lo cual ha terminado creando escuela.

- Ruth Sarmiento, que ha probado varias herramientas muy interesantes y nos ha transmitido también su experiencia con ellas.

- Susanna Garciapons, enormemente creativa en cuanto al uso en su blog de herramientas como Issuu o Prezi.

- María José Alfaro, que también ha realizado algún uso muy interesante de Issuu.

- César Truco, que fue muy activo en el inicio de la asignatura, aunque después se ha visto obligado a dejarla un tanto en segundo término.

etc., etc., etc.

Sobre los blogs, tengo que decir que, salvo algunas excepciones, me he fijado más en los contenidos que en el nombre de la persona que los firmaba, así que me resulta más difícil señalar aportaciones individuales. Pero sí he visto, aparte de contenidos muy interesantes, blogs con un diseño visual muy atractivo y con la incorporación de diversos gadgets, algunos de los cuales me sirvieron de inspiración para mi propio blog.


En resumen, como he dicho, creo que se ha tratado de un grupo que, de forma mayoritaria, ha participado bastante activamente en la asignatura y que sobre todo se ha distinguido de un modo muy especial por la colaboración y por el trabajo en equipo entre todos.




La Library of Congress preservará los contenidos de Twitter

Se ha publicado recientemente la noticia de que la Biblioteca del Congreso de EEUU (Library of Congress, LC) — que es el equivalente en ese país a una Biblioteca Nacional — ha adquirido el archivo de Twitter y va a hacerse responsable de la preservación de los mensajes generados, los cuales de otro modo desaparecerían al cabo de poco tiempo.

Esta iniciativa puede plantear algunas dudas y, de hecho, desde que se publicó la noticia, es un tema que ha generado cierta polémica, como puede verse en los comentarios dejados en el blog de la LC:

http://blogs.loc.gov/loc/2010/04/how-tweet-it-is-library-acquires-entire-twitter-archive/

En este post voy a tratar de dar mi visión personal sobre algunos de estos aspectos.


1. ¿Realmente merece la pena preservar los mensajes enviados a través de Twitter?

En mi opinión, la respuesta debería ser afirmativa. Ha habido acontecimientos muy importantes y que serán objeto de estudio por historiadores y sociólogos durante mucho tiempo, en cuyo desarrollo Twitter ha jugado un papel muy relevante.

Quizás el primer ejemplo de la importancia que empezaba a tener Twitter fue su uso por el equipo de Barack Obama durante su campaña electoral, y los movimientos populares que se iniciaron hace unos meses en Egipto y otros países árabes han venido a confirmar esta tendencia.


2. La mayoría de los tweets son absolutamente banales. ¿Deberían ser conservados todos ellos, o más bien hacer una selección previa?

Es cierto que sólo una pequeña parte de los tweets van a ser realmente interesantes para investigaciones futuras: la mayoría son pura conversación sin trascendencia, envío de enlaces cuyo interés es efímero, etc.

Sin embargo, encuentro muy arriesgado realizar una selección previa, dado que no podemos saber cuáles serán los temas que al cabo de los años podrán ser objeto de estudio por los investigadores. Por supuesto, hay temas, como los que he mencionado al principio, cuyo interés es obvio incluso ahora; pero puede haber otros muchos que los responsables de la LC los consideren banales y que sin embargo sean relevantes para determinadas investigaciones.

Por ejemplo, la pura charla sobre series de TV, sobre cantantes o deportistas famosos, etc., que puede parecer que no tiene ningún interés a largo plazo, podría servir como base para estudios estadísticos sobre los modelos de ocio en el siglo XXI, sobre cómo se configuraba la cultura popular, etc.

Y esto sin contar con que cualquier expurgo debería basarse en una serie de búsquedas por palabras clave o por hashtags, y eso también es muy arriesgado: una búsqueda mal realizada puede hacer que se pierda para siempre información relevante.

Por ello, en la medida de lo posible, creo que lo ideal sería preservar el archivo completo.

Una cuestión lateral al respecto podría ser si hay que conservar también los retweets, dado que constituyen mensajes duplicados. De ser posible, yo sí vería preferible conservarlos también, por dos razones:

a) El número de retweets es también un indicador de cuáles son los temas candentes en un momento dado, cuáles son los usuarios más influyentes, etc.

b) Hacer un retweet no implica necesariamente enviar una copia exacta del mensaje original: podemos modificar parcialmente el contenido, añadir o quitar hashtags, etc.



3. ¿Conservar estos mensajes no viola la privacidad de los usuarios que los enviaron?

Hay que tener en cuenta que estamos hablando de mensajes que fueron enviados a través de un canal público y que podían ser leídos, copiados y conservados por cualquier usuario de Internet; con la excepción, por supuesto, de los usuarios que configuren su perfil como privado, y entiendo que esos mensajes no se van a conservar, o no deberían conservarse.

Pero en cuanto al resto de los tweets, una vez que se han enviado por un canal público, no creo que pueda alegarse ninguna violación de privacidad por el hecho de conservarlos.

Es cierto, sin embargo, que muchos usuarios no son quizás plenamente conscientes de este hecho, y que han enviado muchos mensajes que ellos consideraban efímeros y que no les gustaría que fuesen consultados por cualquier persona al cabo de los años.

En este sentido, incluso aunque no creo que pueda hablarse de una verdadera invasión de la privacidad, sí sería exigible una mayor información a los usuarios del carácter público de sus mensajes y del hecho de que éstos van a ser conservados y se ofrecerán para consulta pública. Estas condiciones deberían indicarse a los usuarios de Twitter de un modo absolutamente explícito, no en un pliego de condiciones largo y farragoso que la mayoría no llega a leer.

Otra cuestión relacionada podría ser: ¿qué pasa si un usuario tenía un perfil público y después decide hacerlo privado? La respuesta que yo daría a este supuesto es muy simple: los tweets que se enviaron bajo un perfil público pueden ser archivados y conservados, pero los que se envíen con un perfil privado no. Me parece el criterio más razonable y que mejor equilibra la privacidad de los usuarios con el carácter público de la mayoría de los envíos.


4. ¿Está justificada la inversión que supone este proyecto, especialmente en un momento de crisis económica?

Este es, en mi opinión, el argumento más fuerte contra esta iniciativa, y no tengo una respuesta clara al respecto.

El volumen de tweets generado cada día es inmenso (más de 50 millones de tweets diarios, según el blog de la LC), así que su preservación exigirá unos recursos materiales y humanos importantes y un plan de preservación muy bien diseñado.

A pesar de que esta información me parece importante de cara a posibles investigaciones futuras, no tengo claro al 100% si es el destino óptimo para esos recursos o podrían dedicarse a otros proyectos más importantes. En definitiva, es una cuestión de establecer prioridades, y tampoco me atrevería a afirmar tajantemente que la preservación de los contenidos de Twitter sea prioritaria hasta ese punto.

Sin embargo, creo que para la LC no es una cuestión sólo de preservar la información, sino también de imagen: una de las razones de esta iniciativa es probablemente presentarse ante el público como una institución muy implicada con las nuevas tecnologías y alejada de la imagen tradicional de las bibliotecas.


5. Si se conserva el archivo de Twitter, ¿no deberían conservarse también otras fuentes similares, como los mensajes de otras redes sociales?

Es cierto. Facebook puede haber sido tan importante en determinados movimientos como Twitter o incluso más, y también lo son la infinidad de blogs en los que los usuarios expresan sus opiniones (tanto en las entradas como en los comentarios), los foros, etc.

Si se deseara hacer en el futuro una investigación completa, lo ideal sería disponer de todas estas fuentes. Pero nuevamente, es una cuestión de recursos: Twitter es una fuente importante y es la más fácil de preservar, al basarse en mensajes de texto de un máximo de 140 caracteres.

Conservar otras fuentes sería muy deseable, pero es probable que supusiera una inversión imposible de asumir. La preservación del archivo de Twitter puede ser un término medio aceptable.

En relación con esto, está también el debate sobre si además de los tweets, no deberían conservarse las páginas web y blogs a los cuales ellos enlazan, para permitir que la información esté completa. El argumento es el mismo: sería lo óptimo, en efecto, pero ya estamos hablando de un proyecto mucho más complejo y que es de temer que consumiría unos recursos excesivos. Aquí sí que puede ser inevitable realizar una selección previa y conservar sólo las páginas web más destacadas.

sábado, 4 de junio de 2011

Lectura 6: Predicciones para los Social Media en 2011

[Reseña del artículo: "Predicciones para los Social Media en 2011". Marc Cortés, ed. Interactividad.org, Marzo 2011
http://www.slideshare.net/marccortes/social-media-predictions-2011]

En este artículo podemos encontrar las predicciones que realizaron en su momento una serie de expertos sobre los cambios que cabía esperar para los social media en 2011.


He seleccionado tres predicciones que me han parecido especialmente acertadas:

1. “Durante el año 2011 tendremos que seguir explicando a las empresas que esto no va de herramientas”.

Y en mi opinión, al paso que llevamos, también durante el año 2012, y el 2013, y el 2014, y el 2020, y el 2025......

Lamentablemente, los gestores de muchas empresas siguen pensando que tener presencia en redes sociales consiste sólo en contratar un software con unas funcionalidades espléndidas y poner después a un becario a hacer el trabajo; del mismo modo que piensan que no necesitan para nada a un documentalista porque les sobra con contratar las mejores bases de datos.

Mientras esa sea la mentalidad dominante sobre el trabajo que hacen los documentalistas, y en lo que aquí nos afecta, los community managers, será necesario continuar explicando una y otra vez que si la empresa no consigue hacerse presente en redes sociales, conseguir comentarios positivos, etc., el problema no se resuelve contratando un software más bonito.

Por ejemplo, uno de los aspectos que habrá que seguir enfatizando cada vez más es que en las redes sociales la comunicación no puede ser unidireccional y que no consisten sólo en enviar a través de Facebook o de Twitter anuncios sobre nuestros productos o servicios: consisten, por ejemplo, en:

- compartir contenidos que realmente sean interesantes para nuestros usuarios/clientes y así ir captando seguidores;

- saber despertar el suficiente interés como para que comenten lo que les ofrecemos, y saber responder adecuadamente a esos comentarios, incluso (o sobre todo) cuando son negativos;

- crear una verdadera interacción con nuestra comunidad de usuarios, e ir aprendiendo de lo que nos transmiten, en vez de usar las redes sólo para transmitirles lo fantásticos que son nuestros productos y servicios;

etc.

Por ello, creo que durante mucho tiempo va a seguir siendo necesario explicar a las empresas en qué consiste gestionar la presencia de la marca en redes sociales, lo cual definitivamente no se lleva a cabo sólo contratando las mejores herramientas.

Una de las frases que yo resaltaría dentro de esta predicción y que creo que resume muy bien estas ideas es que "este 'nuevo mundo' les demanda participar en La Conversación y para ello sus estructuras organizativas deben evolucionar". Aquellas organizaciones que sigan pensando en términos de comunicación unidireccional están abocadas al fracaso en este terreno.

También me parece bastante acertada la idea de que el volumen de información recibido a través de redes sociales hará necesaria la aparición de filtros inteligentes, aunque dudo de que aparezcan a corto plazo, al menos de un modo que resulten verdaderamente efectivos.


2. “Los clientes conversan y las empresas deben saber qué dicen: para ello ya no basta con programar una alerta de Google”.

A medida que la implantación de las redes sociales va siendo mayor, es cada vez más necesario que la empresa sepa lo que se dice de ella para poder gestionar su reputación digital y minimizar el efecto de los comentarios negativos.

Y sobre todo, es esencial tener en cuenta que los comentarios sobre nuestra marca no se producen sólo en nuestro blog corporativo, nuestra página de Facebook, etc. Los clientes pueden hacer comentarios sobre nuestros productos o servicios a través de canales muy diversos y, a menos que dispongamos de un plan de monitorización bien diseñado y en tiempo real, no vamos a llegar a conocer lo que se dice de nosotros y no podremos tomar las medidas oportunas.

Y recalco el aspecto de "en tiempo real": hay herramientas, como las alertas de Google, que pueden ser enormemente útiles para monitorizar lo que se dice de nuestra marca. Pero tienen el inconveniente de que la información nos llega con un cierto desfase, y en caso de que esté circulando por las redes algún rumor que pueda dañar especialmente nuestra imagen, es esencial que lo conozcamos cuanto antes y que podamos responder con rapidez. De lo contrario, para cuando queramos preparar una respuesta, un día o una semana más tarde, el daño para la reputación on-line de la marca puede ser ya irreversible.

Supongamos, por ejemplo, que empieza a circular por redes sociales el rumor de que en determinado hospital se tiran a la basura las historias clínicas de los pacientes, sin el menor cuidado por proteger los datos personales; o que en cierta biblioteca las adquisiciones y los eventos que se organizan tienen un sesgo ideológico clarísimo; etc. Si estas informaciones circulan por las redes durante un cierto tiempo sin que la institución responda de algún modo, después no habrá comunicado corporativo que pueda impedir que la imagen de esos centros quede asociada durante mucho tiempo a dichos problemas, y da igual que sean reales o imaginarios; el daño ya estará hecho.

Por ello, es cada vez más importante que un community manager no se limite a hacer marketing de su institución a través de redes sociales, sino que sobre todo esté muy pendiente de lo que se dice sobre ella y sepa actuar adecuadamente cuando se generen comentarios negativos.

Aparte de la monitorización en tiempo real, hay otras dos frases en esta predicción que resumen muy bien cuál sería la actitud más inteligente de una empresa ante las redes sociales:

- "Que los clientes se conviertan en prescriptores y que sean ellos los que se conecten entre sí y con la empresa, sin tener ésta que perseguirles".

- "La estrategia a seguir no recae sólo en acumular seguidores, sino en ofrecer una buena atención al cliente a través de las herramientas 2.0".



Aquí tenemos dos elementos básicos de la web 2.0:

- Muy a menudo, la información que el cliente reciba sobre nosotros no vendrá de nuestra comunicación institucional sino de lo que le transmitan otros usuarios de las redes sociales, así que tendríamos que trabajar esencialmente en lograr la satisfacción de nuestros clientes, para que sean ellos mismos los que realicen buen parte del marketing institucional, por propia iniciativa. En esencia, es la versión 2.0 del tradicional "boca a boca": las redes sociales están empezando a resucitar una forma de confianza en una institución o empresa, en base a las opiniones de otros clientes, que parecía que tendía a desaparecer.

- Uno de los elementos más positivos que podemos encontrar en un uso bien gestionado de las redes sociales es la posibilidad de atender a nuestros clientes de un modo más rápido y más directo que por otros canales. Es una oportunidad que, si se aprovecha bien, puede ayudar considerablemente a atraer clientes y a fidelizar a los que ya tenemos.



3. “La estrategia digital, será social o no será.”

Cada vez más, va a ser inevitable que las marcas tengan presencia en redes sociales.

Como se remarca en este artículo, hay empresas que prefieren no entrar en redes sociales, por el temor a no poder controlar lo que se diga en ellas. Pero lo que deben entender es que están presentes en las redes sociales tanto si lo desean como si no, porque son los clientes los que deciden comentar su marca, para bien o para mal.


Una empresa o institución puede intentar controlar hasta cierto punto lo que se dice sobre ella en las redes sociales y minimizar el efecto de los comentarios negativos. Pero no está en su mano evitar por completo estar presente en redes sociales, y es importante ser muy consciente de ello.

Y si de verdad la empresa no es mencionada en absoluto en redes sociales, tampoco es una buena señal, es como no estar en Internet: significa que hay una parte importante de nuestros clientes potenciales que no llegan a saber ni que existimos o que descartan directamente nuestros productos por el hecho de no poder obtener opiniones de otros clientes.

Un efecto de las redes sociales es que cada vez más personas confían mucho más en las opiniones de otros usuarios de las redes que en toda nuestra comunicación corporativa. Y por ello, cualquier estrategia de marketing digital debe incluir necesariamente la presencia en redes sociales; y no sólo, como he señalado antes, promocionando nuestros productos o servicios, sino monitorizando lo que se dice sobre nosotros y actuando con rapidez ante los comentarios negativos.

Me ha parecido también muy interesante en esta predicción la idea de que van a aumentar los detractores de los social media:  probablemente, a medida que vayan jugando un papel realmente importante, sus inconvenientes se irán haciendo también más evidentes y eso hará que aumenten las críticas contra ellos. Pero, con sus ventajas y sus inconvenientes, constituyen una parte de la realidad en la que tienen que moverse las instituciones y las empresas, y lo que no tiene sentido es intentar ignorarlos y tratar de actuar como si fuesen un mundo paralelo y pudiésemos mantenernos al margen de él.



PREDICCIONES ERRÓNEAS.

Así como las tres predicciones que he seleccionado me han parecido especialmente acertadas, en este artículo podemos encontrar también alguna predicción que, en mi opinión, es realmente muy poco probable que se cumpla antes de que finalice el año. Por ejemplo:


a) “Será el año del dinero virtual. Después de años hablando de él, se empezará a usar de manera masiva, gracias especialmente al triunfo de Facebook como plataforma”.

Es cierto que este año está empezando a utilizarse el dinero virtual en Facebook, como reflejan, por ejemplo, estas noticias:

http://socialmediatoday.com/pervarakapadia/301003/what-are-facebook-credits-social-media?

http://www.muyinternet.com/2011/05/07/facebook-dara-dinero-virtual-por-ver-anuncios


Sin embargo, encuentro exageradísimo afirmar que "se empezará a usar de manera masiva". Más bien es algo que está apenas empezando a utilizarse y que todavía despierta sólo el interés de un segmento reducido de usuarios. Tendrá que pasar aún bastante tiempo antes de que podamos hablar de utilización masiva.

Además, su utilización se ve limitada por el hecho de que es dinero virtual válido sólo para hacer transacciones dentro de Facebook, pero no podemos emplearlo en otras redes sociales. Es como si cada red social fuese una nación independiente, con su propia moneda, pero con el agravante de que no existen oficinas de cambio de moneda para poder movernos de una nación a otra. Esto, más que a distintas naciones, me recuerda a una nación en guerra civil, en donde el dinero que emiten en una zona del país no es aceptado en la otra.

O más bien, es como si vamos a la feria y a cambio de nuestro dinero nos dan unos tickets que nos permiten pagar dentro de la feria pero son absolutamente inútiles en cuanto salgamos de ella.

Tendrá que pasar bastante tiempo para que el dinero virtual sea realmente utilizado por la mayor parte de los usuarios y no sólo por un pequeño grupo de 'early adopters'. Y uno de los requisitos que, en mi opinión, son esenciales para que esta modalidad de transacciones sea eficaz es que podamos emplearlo a través de diversas redes sociales, del mismo modo que empleamos una misma tarjeta de crédito en diversas tiendas, sin necesidad de tener una tarjeta específica para cada una.


Tampoco comparto en absoluto la predicción de una "Creciente migración a Facebook de webs que hasta ahora tenían su propio dominio. Facebook es más que nada una plataforma". Cada vez habrá más empresas que dispondrán de un perfil o una página corporativa en Facebook, pero en mi opinión, esto no reemplazará a la página web clásica sino que la complementará.

Aunque Facebook tiene un nivel de implantación muy alto, sería un error confundir a los usuarios de Facebook con los de Internet en su conjunto. Y la página web ha llegado a ser el elemento básico de presentación de cualquier empresa y lo primero que miran sus posibles clientes, así que es un elemento de imagen corporativa que debe mantenerse en cualquier caso.

Las empresas tendrán que ir aumentando su presencia en redes sociales, pero la página web sigue siendo, y creo que lo será por bastante tiempo, el elemento central para contactar con la empresa, tan importante como la sede física, y a ella deben converger finalmente todos los perfiles en redes sociales. Una empresa sin página web sería como si no tuviese sede física sino sólo virtual: de entrada, despertaría la desconfianza de muchos posibles clientes.

Por otra parte, puede que Facebook desee ser una plataforma a la que se dirijan en primera instancia todos los usuarios de Internet y que prácticamente no interaccionen fuera de ella; pero en mi opinión, está aún muy lejos de conseguirlo: hoy por hoy, sigue siendo una red social, con una implantación muy grande y un volumen de negocio enorme, pero sólo una red social.




b) “El social media se convierte en algo cotidiano, para personas, profesionales y empresas”.

Las redes sociales están jugando un papel cada vez más importante, pero encuentro exagerado afirmar que durante este año llegarán a convertirse en algo cotidiano.

Es cierto, como he señalado antes, que las empresas deberían estar presentes en redes sociales, porque una parte importante de sus clientes están en ellas. Pero deberíamos recordar al mismo tiempo que un número bastante considerable de personas y de profesionales no están todavía en redes sociales o las utilizan de un modo muy limitado.

Las redes sociales son un canal cada vez más importante para gestionar la comunicación con nuestros clientes y la reputación de nuestra marca. Pero sería un error pensar que se han convertido en algo tan cotidiano como el correo electrónico o el uso de Microsoft Office; estamos aún bastante lejos de ese nivel de implantación, aunque es indudable que su uso va a ir siendo más popular cada año.

Estoy de acuerdo, sin embargo, en que las redes sociales pueden ofrecer oportunidades muy atractivas para los profesionales que sepan utilizarlas. Pero los que lo hacen siguen siendo todavía un segmento relativamente reducido de profesionales, y está lejos de ser una actividad realmente cotidiana.

La predicción que me parece menos acertada de este bloque es que "En 2011 será necesario desarrollar aplicaciones y tecnologías que nos ayuden a librarnos del spam y de todos aquellos usuarios que en lugar de aportar valor en su actividad en las redes sociales únicamente buscan su beneficio sobre el de los demás". Ojalá vayan desarrollándose en efecto esas tecnologías, pero mucho me temo que la realidad a corto plazo va a ser la contraria: a medida que las redes sociales empiezan a ser realmente importantes para el modelo de negocio de muchas empresas, empezará a producirse spam a un nivel similar al del correo electrónico, y será tan complicado evitarlo por completo en un canal como en el otro.

A medida que se desarrollen tecnologías para evitar el spam, probablemente irán surgiendo otras que traten de saltarse esas barreras. Mientras produzca beneficios, no será fácil que desaparezca a corto plazo.


EMPRESAS A LAS QUE PERTENECEN LOS AUTORES DE ESTAS PREDICCIONES.

Finalmente, voy a responder a una pregunta: ¿te ves, en un futuro, trabajando en alguna de las empresas a las que pertenecen los autores de dichas predicciones?

En principio, mi respuesta sería que sí, que sería una tarea que se ajustaría perfectamente a mi perfil profesional, porque en definitiva estamos hablando de Vigilancia Tecnológica, que es una de las posibles tareas que puede desarrollar un documentalista y además algo hemos visto sobre ella a lo largo de nuestro Máster.

Se trata de una Vigilancia Tecnológica algo más transversal de lo que es habitual, ya que estamos analizando unas herramientas de marketing que serían válidas para cualquier empresa; en este caso, no estamos estudiando ni una empresa ni un sector específicos. Pero en esencia, es el tipo de trabajo que sería adecuado para cualquier experto en Información y Documentación.

Sin embargo, también hay que tener en cuenta que estas predicciones no reflejan necesariamente el tipo de trabajo que se realizará de forma habitual dentro de cada una de estas empresas. Por supuesto, todos estos expertos conocen a fondo el mundo de las redes sociales, y en ese aspecto sus empresas sí que podrían ser un destino profesional bastante atractivo; pero sería necesario conocer un poco más a fondo el trabajo concreto que se realiza dentro de ellas para poder decidir si se ajusta realmente al perfil de una persona concreta.